La Tertulia Taurina cerró el pasado miercoles su ciclo de invitados por el periodo estival, y lo hizo con el torero y director de la Escuela Taurina de Badajoz, Luis Reina, en la que alrededor de tres horas fue degranando su trayectoria profesional, además del futuro de las escuelas taurinas.
Su vocación taurina se debe principalmente
a su entorno familiar, motivado siempre por su padre, “Curro Echevarria” que
fuera banderillero, y
que solía acompañarle a todos los eventos. Conoció a su representante Antonio Ródenas, - hombre de la casa Chopera - que lo vio torear un día en la plaza de toros de salón, y hasta al alternativa del torero nunca se separaron.
De novillero con picadores, recuerda Reina, «toreé en las mejores plazas, y tuve cierto ambiente, la verdad porque me apoderaba una casa importante, pero en eso tiempos el que me viese anunciado con taanta regualridad y sin costarme una peseta, era un logro importante. Ahora todo es distinto.».
Nos habló de su mala suerte en las cogidas, de sus lesiones de huesos, las peores, y la desmotivación en el momento de su retirada, al ver como cada año triunfaba en plazas de su tierra, y al año siguiente ni le ponían. Así decidió retirarse.
Nos contó la anécdota de su carrera como ser el primer torero que se puso publicidad en los vestidos. Nos relató con pelso y señales, el contrato que le vinculó con la industria japonesa AKAI, y que firmó con ellos en 1986, por la mediación de su apoderado Diego Bardón, al precio de 10 millones de pesetas. Su decisión no fue compartida por el sector, porque según palabras de Reina, «se creían que iba a romper los moldes de la estructura del toreo». Sin lugar a dudas una avanzado en su tiempo.
Para terminar habló de su trabajo en la escuela, en la que afirmó que se encuentra muy motivado, y con ganas de aprender y enseñar. De su primera promoción de toreros extremeños, Javier Solís, Israel Lancho y Moreno de Terry, guarda nostalgía, y de los Perera, Talavante, Garrido, Marín, etc., muestra la satisfacción de observar como han llegado algunos a ser figuras del toreo. Todo - según el - fruto del «sacrificio de los chavales, y su técnica. Su trabajo está ahí, pero la capacidad es de ellos.».
En fín, tres horas con sabor taurino con una persona sencilla, cercana, y con el que se puede hablar de toros y toreros. Gracias Luis Reina por tu presencia en la tertulia.
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